La gestión de Moyano, en sus comienzos, sacó a Independiente de sus problemas de endeudamiento, realizó una renovación infraestructural total en el Estadio Libertadores de América, los predios de entrenamiento y la sede social del club, que se encontraban en un estado de abandono y casi precarizados. Real con autorización para usar en todos sus documentos el escudo y armas reales y anunciando a la vez que Su Majestad el Rey se ha dignado aceptar la presidencia honoraria que este Club le había ofrecido en súplica.” Así pues, el 4 de febrero se produjo la concesión, siendo el 7 cuando la celebración de la sesión extraordinaria hizo oficial a todos los efectos el título a favor del Club Deportivo de la Sala Calvet, que desde entonces pasó a convertirse en “Real Club”; una mera adenda en la denominación que tuvo una gran resonancia en la ciudad.